Quédate aqui

  Meripoza, 28

Dime cuál es tu canción, el color de tu maleta y el sentido de pertenencia que hace más fuerte tu apego, dime cuál es mi canción y prometo que la borraremos en mi cintura no tan ausente, no tan marcada. Te veo sufrir y aunque roto, completo eres. Todos tenemos una parte descompuesta que tiene un nombre y un aroma, la parte incómoda del corazón que apretuja las relaciones sociales. La parte sensible que se motiva con cuatro huellitas y la premura de una agenda repleta me hace saberte distante, pero aunque distante, libre me sabe está ligereza que se guarda en una maleta y en el curvilí­neo de mi cabello. Cómo te despojo si llegas adentro y más adentro, como te despojo si te sabes tan mí­o, como me despojo si me dicen tuya; si el candor de tu mano ni siquiera sabe la mí­a, como presumo si tus besos son los sueños que he imaginado juntos. Estás aquí­ impregnando a todo lo que hay, como lo llamamos nosotros, si nuestra débil juventud no respalda todo este sentir. Que una vida me baste para caminar junto a ti, que tu brazo sea mi refugio y mi sostén, que la luna sea ese sello que firma ese pacto tan sutil y delicado de tu mirada en la mí­a. No sé tus besos, ni sé tus caricias pero te sabes tan mí­o que me saben tus sonrisas Quédate aquí­...