Escuchar, ser escuchado, disfrutar de la naturaleza, sorpenderse o simplemente sonreir, son detalles que no tienen precio, que especialmente en esta etapa de la vida resulta gratificante compartir.
Carolina Estoy totalmente de acuerdo contigo Pilar. Igual, me parece que el ver el sol cada maƱana, ya es algo que muchos no pueden hacer y debemos de valorarlo.
20/09/2015